Cinco camiones de contrabando con alimentos procedentes de Argentina fueron decomisados ayer gracias a un operativo de la Aduana Nacional de Bolivia (ANB) de forma conjunta con las Fuerzas Armadas.
La presidenta de la Aduana, Marlene Ardaya, informó que realizarán procesos penales a los contrabandistas que pusieron resistencia en los operativos que realiza esa entidad.
“Operativos con patrullas de la Aduana y el Ejército están dando buenos resultados en ese sector, ayer y hoy día por la mañana se han decomisado cinco camiones grandes que venían de Argentina, básicamente son productos comestibles”, declaró Ardaya a la Agencia Boliviana de Información (ABI).
La ejecutiva de la ANB informó que cuatro camiones fueron retenidos en la ruta Villazón - Tupiza y el quinto motorizado se lo detectó en el tramo Villazón - Tarija. Los vehículos pretendían ingresar harina, azúcar, arroz y aceite, entre otros productos alimenticios.
En el último camión que se dirigía a Tarija los contrabandistas se opusieron a la retención del motorizado y un efectivo militar tuvo que disparar a la pierna de un sujeto que se comportó de forma violenta.
La Aduana incrementó los operativos de control de forma conjunta con las Fuerzas Armadas, con el objetivo de reducir el contrabando en las regiones consideradas de alto riesgo.
Patrullaje aéreo
Ante la cercanía de las fiestas de fin de año el comercio se incrementa en todo el país y los contrabandistas aprovechan la coyuntura para ingresar productos de forma ilegal.
En ese contexto, la Aduana realizará en los próximos días patrullajes aéreos por el sur del país con el objetivo de identificar las principales rutas del contrabando y ubicar los depósitos de mercadería para decomisar esos productos.
El trabajo de inteligencia de la Aduana identificó las zonas de alto riesgo, incluso algunas poblaciones no dejan ingresar a los funcionarios aduaneros.
Por esa razón se realizan patrullajes aéreos para que los operativos tengan mayor impacto en la lucha contra el contrabando.
Primeros resultados
Los patrullajes aéreos se realizaron en la población fronteriza de Sabaya (Oruro) y en 72 horas de operación se logró confiscar mercadería valuada en un millón de dólares.
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